Pinto Flores, para que no mueran… Frida Kahlo

En 1907 nació una flor solitaria, una mujer difícil de descifrar; Frieda o era Frida, se convertiría en muchas mujeres, todas ellas distintas que vivirían dentro de una misma.  Fue Mujer, Hija, Hermana, Esposa, Amiga y Amante; una Artista que pintaba flores y que es hoy la musa que inspira este Jardín, y que le da sentido a todos los que sin determinación de tiempos y espacios, tenemos algo de ella en nuestras vidas.

Frida sufrió dos accidentes en su vida y como accidente ella llegó a mi vida; como un segundo ejemplo de que a pesar de las condiciones físicas, una mujer que asume su realidad con entusiasmo, irreverencia y convencimiento de su valor, es una mujer con poder, que no se deja vencer por las circustancias, que es capaz de romper las barreras del tiempo para convertirse en un icono mundial de quienes nos atrevemos a ser diferentes.

Este Jardín de Frida es un pequeño ecosistema donde habitan y conviven entre sí las flores que ella tanto amaba. Seres vivos con diferentes temperamentos, con una tenacidad comprobada, con la valentía indispensable para vivir en este mundo, con la sensibilidad que reconforta y da esperanza, con colores que expresan pasión, amor, dolor, matices, formas y elementos que es imposible dejar de admirar.

Como Frida, tal vez soy una persona curiosa con todo lo que el adjetivo y la acción implica, quizá soy una rebelde con causa; pero de lo que estoy completamente segura es que tal y como Frida vivió, siendo ella genuina y auténtica, se puede conquistar al mundo siendo quien eres, con defectos y virtudes, con un concepto de belleza propio, sin disculpas y sin prejuicios… libre de expresar sentimientos, pensamientos, de luchar, amar y odiar intensamente… sin límites. El Jardín de Frida es el árbol de la esperanza que nos mantiene firmes.

El Jardín de Frida es un rincón personal y especial, abierto a las historias, anécdotas, ejemplos de vida, temas de interés y  la oportunidad de concidir o diferir bajo la perspectiva de Frida. Un espacio pasional, analítico, franco, pero también humano y sincero; nosotros los miembros de este Jardín somos el resultado de las experiencias vividas, que serán sin duda abono para el espíritu y la mente de este ecosistema donde las palabras describen las acciones que perduran.

¡Bienvenidos al Jardin de Frida!

Beatriz Alvarado

Chief Gardenist

¿Se pueden inventar verbos? Así mis alas se extienden enormes para amarte sin medida.

Frida en su época fue reconocida por ser la esposa de Diego Rivera, siempre femenina, con coloridos atuendos, collares, flores adornando su cabeza, una sonrisa de labios rojos y una personalidad con la que trazó su propio destino. Convirtió su vida en una leyenda, amó y sufrió intensamente y con sus obras nos dejó la que hoy creo es su más importante creación artística: su imagen y legado, símbolo del poder femenino.

Si se pueden inventar verbos, ¿entonces se pueden inventar palabras? Yo creo en el empronismo. Si existiera esta palabra describiría a todas las mujeres que tenemos un poco de Frida; nuestras alas se extenderían enormes para reclamar el empoderamiento, protagonismo y feminismo que nos impulsaría a atacar y destruir los tabúes en nuestras vidas… ¡Frida hizo lo que se le dio la gana!

Frida pudo ser marginada por muchas razones, desde antes de nacer ya venía marcada por ser hija de un inmigrante y por su ascendencia indígena, era mujer en una época en que serlo implicaba debilidad, sumisión, aceptación de un rol precario en voluntad y pensamientos, contrajo poliomielitis, lo que afectó su pierna derecha. Por si fuera poco Frida tuvo dos accidentes: una la dejo discapacitada permanentemente y el otro, Diego, la dejo rota del corazón y de los sentimientos.

Sin duda Frida habría tenido suficientes razones para no creer en el empronismo, afortunadamente esas mismas razones contribuyeron a crear y sobre todo a vivir cada día de su vida, un mensaje universal que la convirtió en una figura icónica e irrepetible en las artes, la cultura, el feminismo y la idiosincrasia latina en el mundo. Su personalidad excéntrica e irreverente la hizo libre desde niña, vivió y murió sin pedir permiso o pedir disculpas, tuvo y ejerció naturalmente el poder de hacer que el mundo la mirara a través de sus propios ojos y representar los valores de la mujer moderna, que no respeta las convenciones sociales, que es libre, autosuficiente e independiente, que no tiene miedo, que no se doblega ante nada ni nadie.

¿Igualdad de Género? 

Beatriz Alvarado

Chief Gardenist

“Me importa una mierda lo que piense el mundo”- Frida Kahlo.

Todo el mundo tiene una opinión, pero ¿eso a mí qué me importa? ¿Eres de las personas que como a Frida, le importaba muy poco la opinión de las personas y de lo que en conjunto opinaban sobre ella?

¿Que por qué digo esto? La razón para pensar así es muy simple: ¿Por qué tendría que importarme lo que fulana, zutano o mengana hablan, piensan o prejuzgan sobre mi si no han vivido mi vida, si nunca ha estado en mis zapatos, si no han recorrido mi camino, si no han marcado las huellas de mis pasos, no han sentido el sudor de mi cuerpo, mis temores, mis sacrificios, mis alegrías y tristezas, los buenos y por supuestos los malos pensamientos… repito: ¿Por qué tendría que importarnos la opinión de los demás?

Frida fue diferente, honesta consigo misma, enigmática y única. Ella nació jodida, pero fue feliz en el camino. A Diego le escribió: “… tu no entiendes lo que soy. Yo soy amor, soy placer, soy esencia soy una idiota, soy una alcohólica, soy tenaz.  Yo soy, simplemente soy”. El simplemente ser es una definición genial, mágica, sensible y exacta de Frida a quien no le importaba la opinión de los demás, solo la de ella misma.

Y yo, solo pretendo ser yo. La opinión de la gente me ha ayudado a reconocer lo poco que me importa y esto ha reafirmado lo que soy y siempre he pretendido ser: una mujer rebelde, idiota, caprichosa, tenaz y a veces también como Frida un poco alcohólica…

La realidad, depende de uno mismo y no de los demás: el mundo tratará la mayoría de las veces de jugar en tu contra, golpear tu autoestima, intentará boicotearte o hacerte competencia desleal justo cuando estas felizmente realizado y viviendo la vida que se te da la gana o la que te tocó vivir. Así de claro y tajante, así el mundo, el exterior, la sociedad, los modales, las buenas costumbres o como quieras llamarle querrán acabar contigo… pero si al final de cada día eres feliz en tu camino, ¡Que te importe una mierda! Que nada te afecte, aprende a amarte, a amar lo que eres y lo que haces, conócete a ti mismo. De la única persona que necesitas aprobación es de ti mismo, nunca pero nunca de los demás… atrévete a ser genuino y auténtico, atrévete a simplemente ser.

¿Y a ti te importa lo que piense la gente?

Beatriz Alvarado

Chief Gardenist.